
Su objetivo en la vida está muy claro: “compartir la visión de Dios” a través del canto. ciego de nacimiento pero con un gran don: una voz angelical, un talento al servicio de Dios.
Las discapacidades físicas y mentales no han impedido al talentoso joven americano hacerse famoso y así, en el transcurso de los años ha encantado al público con su melodiosa voz.
Christopher es muy conocido en Los estados Unidos y ha dado alrededor de 120 conciertos en eventos cristiano evangélico en su mayoría
En 2013 se públicó su primer álbum, llamado Ojos de mi corazón, lleno de alusiones a la Biblia y al amor de Dios por los hombres.
Christopher es un activista de la asociación de voluntariado Ocho días de esperanza. Para el niño, como se lee en su web oficial y en su página de Facebook, el evangelio es muy importante: entre sus influencias musicales, el puesto de honor lo tienen las Sagradas Escrituras.
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